
No quería comentar mucho por el blog lo que sucedió este fin de semana, pero viendo el estado de ánimo horrible en el que me encuentro por la pérdida reciente de la mejor de mis perras, tengo que escribirlo..por ahi hasta sirve como desahogo..
Mi idea era publicar cosas que me gustan hacer y compartir, sean de tejido o manualidades sin dejar que se filtrara algo de mi vida particular y mucho menos de la tristeza que me embarga pero, la complicidad y hermosa amistad que hemos adquirido en estos últimos años con muchas blogeras amigas, me lleva a compartir con ustedes, con todos, el concepto de que las manualidades y artesanias es una cosa y los sentimientos otra muy distinta...
Tina, la mejor de mis perras ha dejado éste mundo hace dos días..Exactamente en la madrugada del sabado 20 de Setiembre, a las tres y media... y lo ha hecho con la dignidad que acompaña a los de su especie. Aunque yo sea consciente de que ningún animal, que no sea humano, es capaz de predecir su futura muerte ni tenga el sentimiento de miedo que acompaña a todos los seres vivos.. quien mal o bien le teme a la muerte ?, la cosa es que la mirada de mi perra parecía indicar su deseo de una despedida..
He leído tantas veces artículos sobre la vejez del perro etc etc. Cuántas veces recomendaba afrontar el final con decisión,y les hacía hincapié en el concepto de no hacer sufrir innecesariamente a nuestros amigos y les explicaba como veían ellos la proximidad de su muerte.
Yo ya he perdido muchos perros, muchos gatos, casi todos de viejos, pero ésta perra era muy especial para mí....
Tina era la perra que mi mamá cuidaba y quería tanto, incluso hasta cuando se murió mi vieja estaba debajo de su cajón, porque Tina se habia metido a escondidas en el velatorio de mi mamá, y siempre fue mi compañera..en las tristezas y las alegrias..siempre la mirada atenta y guardiana cuidando a mis hijos, siempre durmiendo cerca mio, o durmiendo con mi tía, que murió hace dos años atras..siempre compañera, siempre fiel..asi que imaginen cuando el veterinario me dijo de que vayamos evaluando una eutanasia... me cayó encima como una piedra enorme...¡¡¡
Y hoy siento que debería haberle dicho que sí a la eutanasia el mismo viernes a la noche..porque estuve al lado de mi perra hasta el último suspiro, y muy dentro de mí siento que no tuve el valor suficiente para tomar la desición..
Todos en casa me dicen que ya no sufría, que somos nosotros los que atravesamos todo ésto..pero dentro mío siento que debería haber tomado otra desición..que pasara de la vida a la muerte como un sueño..
Mientras tanto me consuela pensar que está descansando en otro hogar, en otro mundo, junto a mis seres queridos y mascotas, que ya no están y que ella está feliz...